Como primer acto me gustaría aclarar un cuanto o tanto el titulo, esperando no haber creado ofensa o resentimiento alguno contra persona o grupo alguno, y aclaro lo antes dicho en base a que los propios Diados creadores de estas enmiendas jurídicas enfatizan dicha “característica” del mismo.

La nueva “ola legislativa”, haciendo a un lado los problemas más graves que están presentes en cualquier esquina de nuestro México y en su afán de alcanzar el tan anhelado y cada vez más distante puesto Primer Mundista, al cual, cualquier personaje, que se diga “político”  anhela llegar, a creado una gama de novedosas rutinas jurídicas, las cuales ponen en tela de Juicio, en muchas ocasiones la discapacidad, que como diría la frase “sin querer queriendo” de dejar desprotegido o vulnerable algún otro punto legal. Hago del conocimiento de ustedes lectores del presente, que en el Estado en el que radicó, se presentó una reforma Legal Penal, la cual tenía como finalidad, la de castigar, con “tremenda tunda jurídica” a todos aquellos pequeños malandrines, menores de edad, que amparados en su placentera situación como tales, gozaban de los privilegios de cometer delitos de adultos, y fue entonces que, hábilmente los “audaces” legisladores redefinieron el Concepto de la Edad Penal, la cual la redujeron, con el fin de enclaustrar a los antes mencionados; pero que enorme fue el descuido digo yo, siendo experiencia vivida en alguna de mis defensas jurídicas, el olvidad que el Estado en el que ejerzo, es uno de los que tiene mas problemas con la Pederastia y Pedofilia, en cuanto a que, por Definición constitucional, “los hombres y las mujeres somos iguales ante la Ley”, siendo entonces que tenia que desaparecer “la edad legal para las mujeres”, quedando vulnerables desde los dieciséis años. Claro está que todo se corrigió como en un “toque mágico”, y como dirían, fue un simple “error de dedo”.

Hago referencia de dicho caso, porque ahora, en la Ciudad de México, de la cual soy orgullosamente originario, ha surgido el nuevo Derecho Gay, con una serie de Disposiciones Jurídicas, con la finalidad de reconocer, finalmente, todos y cada uno de los derechos a que este grupo de ciudadanos tiene derecho.

Yo no digo que no existan derechos, pero he de recordar la anterior experiencia en párrafos antes mencionados, ¿esta nueva “marejada” de derechos no conllevará a un nuevo descuido Legal?, yo tengo la firme idea de que si, y me explico de la siguiente manera:

Como definición de Matrimonio, teníamos entendido que a groso modo era la unión entre un Hombre y una Mujer, por tanto, una de las causas mas usadas de divorcio, que es el adulterio, era la cópula  cometida entre un hombre o mujer casado, con otro hombre o mujer, siendo entendible que “solamente se podía hombre con mujer y viceversa”, ya que no existía de manera técnica otra forma, pero pregunto, ¿con la nueva forma de matrimonio, reconocida civilmente, no se podrán configurar los adulterios gays?.

Reitero mi más sincera empatía con todos los homosexuales y heterosexuales de este y demás Foros que pudiesen leer este libelo de opinión y recuerdo que no tiene más que fines meramente jurídicos.

Sin mas que felicitar a Nuestro México, porque a duras penas pero llegamos a nuestro Bicentenario, me despido.

Atte.

Abogado Alberto Rojas

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Autor: albertorojas (Visita mi Oficina)