"La investigación y persecución de los delitos incumbe al Ministerio Publico, el cual se auxiliara con una policía que estará bajo su autoridad y mando inmediato..."

Hasta antes de la reforma así rezaba el articulo 21 constitucional, aunque en verdad pocos son los que saben todo lo que encerraba este pequeño extracto; actualmente con tantos "especialistas" en temas de seguridad publica, procuración y administración de justicia puede ser fácil confundirse entre tantas opiniones, lamentablemente gracias a la falta de seriedad de algunos comunicólogos a veces el tema de seguridad nacional es abordado como si se hablara de la selección mexicana de fútbol, todos opinan y todos son expertos.

Sin embargo, entre tantas opiniones de los "nuevos expertos" en las que ponen en el banquillo de los acusados a la figura del Ministerio Publico, no he tenido la fortuna de escuchar el derecho de replica del representante social.

Quienes que por motivo de nuestra profesión tenemos el privilegio de ver las dos caras de la moneda estamos enterados un poco mas de la realidad y sabemos que el Ministerio Publico, en su función de investigador de delitos, ha quedado reducido en un solitario y temeroso personaje. Si, solitario por que una vez fue la columna vertebral de un sistema penal que hoy se encuentra rebasado, y temeroso por que tiene en contra los siguientes factores:

1) Jueces sin escrúpulos, quienes excusados en formalismos o meros pretextos procesales dejan en libertad a los pocos responsables de los delitos que les son puestos a su disposición.

2) Policías corruptos o miedosos, que realmente están más que lejos de: "bajo su autoridad y mando inmediato"

3) Reporteros extorsionadores, cuya pluma solo se mueve en favor del funcionario cuando es motivada por algún aliciente "extra".

4) Órganos de Control, Contraloría, Áreas de quejas, supervisión, visitaduria, órganos dedicados a la protección de derechos humanos, etc., etc... en cuyas filas también se encuentran personajes motivados por otras causas muy lejanas a las de la creación de estos entes.

5) Delincuentes y familiares de los mismos... quienes ofrecen una amplia gama de amenazas que van desde las mas simples hasta las mas atrevidas en contra de toda la familia.

Ahora bien, como cereza en el pastel cabe destacar que nuestro país es el único en todo el mundo que no le otorga al "investigador y perseguidor de delitos" la portación de arma de fuego, negándole con esto el derecho mas básico a la defensa.

Todo lo anterior hace una mezcla muy nociva para quien tiene como trabajo lidiar diariamente con estos factores, añadiéndole el ingrediente canceroso mexicano de: "quien no trabaja no se mete en problemas" muy recurrido en el área de seguridad publica, así bien colegas, la presente opinión no es una justificación sino una exposición de factores que no he visto en ningún programa de "expertos" y que me atrevo a reducir en la siguiente premisa:

"No puedes pedirle al ratón que se porte como león”

Me despido con la esperanza que esta exposición de factores llegase a ser agregada en la ecuación de los “expertos” en materia de seguridad publica.   

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Autor: Serpico (Visita mi Oficina)