Hace tiempo, encontré esta historia parecida en Internet, y se las aporto:
"...Soy una mujer amancebada
Por Diario Popular el Sáb, 18/07/2009 - 03:00
Soy una mujer amancebada, como decían antes.
Hoy escucho que mujeres caraduras dicen tranquilamente "mi marido" por sus concubinos, cosa que no está bien.
Porque si una mujer si no es tan mujer como lograr que el hombre que tiene se case con ella, no es del todo una señora.
De eso estoy convencida, esa es mi desgracia porque el padre de mis hijos por lo visto nunca me quiso suficiente, ya que no se casó conmigo.
Inclusive, ahora está muy enfermo y su hijo mayor le pide que se casé conmigo, para que yo me quede tranquila por haber vivido en pecado todos esos años (mi hijo sabe todo lo que sufro y sufrí), pero él se niega rotundamente.
Yo en el fondo sé que no me perdona un error que tuve en mi juventud.
Fue porque cuando quiso casarse, yo le confesé que ya había tenido relaciones íntimas con mi ex novio, un hombre que no le agradaba a mi mamá y con quien me veía de ida al colegio por ahí.
El por eso no quiso casarse más, desapareció un tiempo, y después me dijo que si quería, podíamos vivir juntos, pero que su idea de una boda era con una mujer limpia moralmente.
Yo primero no quise, pero después mi mamá, y no quise quedarme sola, por eso acepté.
Tuvimos cinco hijos, pero él siguió con esa espina en el corazón, y aún en cama y quizás con poco tiempo de vida, no quiere casarse.
No sé como convencerle para que me lleve al altar.
Melania
Respuesta
Deberías llevarle algún pa'i para que procure ablandarle un poco.
Y si no quiere, bueno, no vas a poder obligarle ni tendrías que tener ningún interés en eso, porque a fin de cuentas, vós tenés la voluntad de ponerte bien con tu fe, pero es él quien se niega.
Así que quien comete ese pecado, ya que lo ves como tal el concubinato, es él y no vos.
En tu caso, y con lo católica que sos, te bastará con arrepentirte sinceramente y confesarte.
Es una lástima que hayas caído en el juego sin sentido de ese hombre que será el padre de tus hijos, pero nunca te supo valorar realmente. Si te quiere, no supo demostrarlo nunca, porque puso sus prejuicios estúpidos por encima de vos..."
(Nota: No compart ni critico el "consejo" contenido en la respuesta de transcripción, simplemente transcribo)
Soy una mujer amancebada
Por Diario Popular el Sáb, 18/07/2009 - 03:00
Soy una mujer amancebada, como decían antes.Hoy escucho que mujeres caraduras dicen tranquilamente "mi marido" por sus concubinos, cosa que no está bien.Porque si una mujer si no es tan mujer como lograr que el hombre que tiene se case con ella, no es del todo una señora. De eso estoy convencida, esa es mi desgracia porque el padre de mis hijos por lo visto nunca me quiso suficiente, ya que no se casó conmigo. Inclusive, ahora está muy enfermo y su hijo mayor le pide que se casé conmigo, para que yo me quede tranquila por haber vivido en pecado todos esos años (mi hijo sabe todo lo que sufro y sufrí), pero él se niega rotundamente.Yo en el fondo sé que no me perdona un error que tuve en mi juventud. Fue porque cuando quiso casarse, yo le confesé que ya había tenido relaciones íntimas con mi ex novio, un hombre que no le agradaba a mi mamá y con quien me veía de ida al colegio por ahí. El por eso no quiso casarse más, desapareció un tiempo, y después me dijo que si quería, podíamos vivir juntos, pero que su idea de una boda era con una mujer limpia moralmente. Yo primero no quise, pero después mi mamá, y no quise quedarme sola, por eso acepté. Tuvimos cinco hijos, pero él siguió con esa espina en el corazón, y aún en cama y quizás con poco tiempo de vida, no quiere casarse. No sé como convencerle para que me lleve al altar.
Melania
Respuesta
Deberías llevarle algún pa'i para que procure ablandarle un poco. Y si no quiere, bueno, no vas a poder obligarle ni tendrías que tener ningún interés en eso, porque a fin de cuentas, vós tenés la voluntad de ponerte bien con tu fe, pero es él quien se niega. Así que quien comete ese pecado, ya que lo ves como tal el concubinato, es él y no vos. En tu caso, y con lo católica que sos, te bastará con arrepentirte sinceramente y confesarte. Es una lástima que hayas caído en el juego sin sentido de ese hombre que será el padre de tus hijos, pero nunca te supo valorar realmente. Si te quiere, no supo demostrarlo nunca, porque puso sus prejuicios estúpidos por encima de vos.