Los parámetros que usamos en la educación de nuestros hijos generalmente son los que usaron para educarnos a nosotros, con algunos pequeños cambios que hacemos creyendo que hay que “actualizarnos y ser más modernos” para entendernos con los chicos.

Los puntos de vista vertidos en esta consulta sin lugar a duda tienen su sustento en la costumbre y forma de educación familiar de cada quien y básicamente eso es lo correcto, no obstante siempre será inteligente buscar el termino exacto, no el termino medio, no, repito el termino exacto donde el estira se convierte en afloja y donde el ceder debe cambiarse en negación, pero más que las palabras, lo que realmente educa y crea conciencia es el ejemplo, no puede un padre decirle al hijo que no fume y no tome si el llega a su casa alcoholizado y oliendo a cigarrillos, o lo que es peor, se alcoholiza en su propia casa, frente a su familia, o la madre que le dice a la hija que los fármacos crean dependencia y adicción pero ella toma pastillas para la depresión o para dormir todos los días.

En cuanto a la problemática en la escuela, cierto como ya lo dijeron los uniformes no son obligatorios, pero unifican e identifican, el aseo de los jóvenes debe ser esencial imaginan el olor en las aulas con uno o dos jóvenes sin bañar? Los jóvenes de pelo largo? No le vería mayor problema si acuden a la escuela bien peinados incluso con el pelo recogido, las niñas maquilladas, siempre y cuando no se les confunda con el payaso del crucero, que su maquillaje sea sutil como el simple gloss de labios, pero observen son situaciones y conductas que dependen de los padres, si los hijos observan que sus padres se levantan se visten y se van a trabajar sin bañar, pues entonces para ellos es algo normal y permitido, si los hijos observan que su padre es descuidado con su corte de cabello, el será igual, y si las jóvenes ven que su madre se “carga” de maquillaje, entonces ella también lo hará y encontrará incomprensible que en la escuela le digan que eso no está bien.

En cuanto a la actitud de los maestros de lanzar a la calle a los jóvenes por la razón que sea, no es correcto, lo ideal seria retenerlos en prefectura, llamar al padre o madre, entregarle al joven y decirle la causa del rechazo, exponerlos a ser contaminados por el vicio y los peligros de la ciudad es un riesgo innecesario y esto se puede subsanar a través de la mesa directiva de los padres de familia coordinando con la Dirección el procedimiento para que ya no ocurra más.  

El sentido común nos dice que no debemos matar moscas a balazos ni leones a pedradas. Un adulto debe tener sentido común para saber si tiene delante una mosca o un león. Si en algún momento tiene dudas, debe buscar ayuda para tener las ideas claras antes de actuar.